¿Qué es un “PIAS”?
Entre la gama de productos de ahorro a largo plazo que puedes encontrar englobados dentro de lo que se conoce como “garantizado” se encuentran los denominados “Planes Individuales de Ahorro Sistemático” o “PIAS”. Seguro que en algún momento has encontrado estas siglas y te has preguntado: ¿Qué es un “PIAS”? Pues bien, si están valorando la posibilidad de contratar un producto de estas características, debes saber que este es uno de los productos que ofrecen las aseguradoras para ir ahorrando de cara a la jubilación y en el post de hoy te contamos todo lo que necesitas saber acerca de él.
Planes Individuales de Ahorro Sistemático
Los PIAS surgieron en el año 2007 como un producto sobre seguros individuales de ahorro. Se trata de un seguro de vida-ahorro que ha sido creado para realizar aportaciones periódicas, normalmente de manera mensual, con las que se suele generar ahorro para compensar la pensión pública o cualquier otro cometido en el que esté interesado el asegurado. Además, como dato curioso, te contamos que la mayoría de compañías lo han venido anunciando desde su creación como una alternativa a los “Planes de Previsión Asegurados” (PPA) y los planes de pensiones por la posibilidad de rescatar el dinero en cualquier momento y porque al inicio la mayoría de los que se ofrecían estaban garantizados.
¿Cómo funcionan?
De manera tradicional, los PIAS han invertido en renta fija con rentabilidades que no suelen superar las de un depósito. Tan solo en los últimos años las aseguradoras se han lanzado a comercializar lo que se denomina “PIAS flexibles”, que hacen referencia también a una parte de inversión en renta variable. Y, por tanto, en este tipo de ocasiones, ya no cuentan con garantía.
No obstante, el funcionamiento es muy parecido. Como ahorrador realizarás aportaciones periódicas a tu producto, que irá sumando capital y un rendimiento anual que dependerá de lo que se establezca en la póliza. En cualquier caso, tu aportación no podrá superar los 8.000 euros anuales, ni el total acumulado de 240.000€.
Muchos también pueden añadir bonos en forma de pagos por parte de la aseguradora por mantener la inversión. De este modo, podrás retirar tus ahorros en cualquier momento, pero solo pasados 5 años tendrás ventajas fiscales si lo recuperar como renta vitalicia en lugar de como capital, todo de golpe.